Estepona puso en marcha en 2012 un nuevo modelo de ciudad y sociabilidad. Una ciudad intrínsecamente moderna en sus atributos de multiculturalidad, movilidad y diversidad. De este modo ha recuperado su esencia gracias a la voluntad colectiva de sus habitantes y su implicación con el proyecto de regeneración impulsado por el Ayuntamiento de Estepona bajo la denominación ‘Estepona, Jardín de la Costa del Sol’.
Proyecto
Se trata de un proyecto de regeneración de infraestructuras de servicios, pavimentación y de revegetación con especies autóctonas y ornamentación floral. Se inició hace una década y sigue activo con nuevas iniciativas complementarias. De este modo, se potenciaron las fortalezas de los atributos urbanísticos y arquitectónicos de la ciudad. Hemos desarrollado de manera sostenible de los recursos, logrando un conjunto armonioso de experiencias naturales construidas. Como resultado de todo esto, se redefinió el modelo de centro urbano. Se ha convertido en un auténtico vergel inspirado en las cadenas montañosas y pinsapares que desde hace siglos son apreciadas por botánicos y naturalistas.
Estepona, jardín de la Costa del Sol
Estepona cuenta hoy con la singularidad y excepcionalidad de haber desarrollado un núcleo urbano peatonalizado y con tráfico restringido en más de 19 kilómetros lineales. Se ha realizado una regeneración urbana y embellecimiento con vegetación en más de 130 calles y plazas públicas, que comprenden una superficie de 70.000 metros cuadrados. Toda esta nueva trama urbana ha sido “naturalizada” con la plantación de miles de árboles. Pero también con proyectos complementarios como el Parque Botánico-Orquidario, que cuenta con el reconocimiento de la mayor colección de especies de orquídeas de Europa. A esto hay que añadir la creación de más de 400.000 metros cuadrados de nuevos parques y zonas verdes públicas que se han incorporado al tejido urbano. De este modo, Estepona duplica la media nacional de espacios verdes, con un índice de 9,39 metros cuadrados de zona verde por habitante. A ello se une la creación de un corredor litoral que está conectando los 22 kilómetros de frente marítimo para ser transitados disfrutando del entorno marino. En el siguiente enlace puedes encontrar otros ejemplos de buenas prácticas medioambientales.
